Denuncian posibles riesgo de deslizamientos en viviendas de interés prioritario que entrega la administración distrital

El Concejal del Partido Alianza Verde Jorge Torres, denunció que 988 viviendas del proyecto Rincón de Bolonia, hechas por la administración del Alcalde Gustavo Petro,fueron entregadas sin servicios de educación y salud cercanos.

El Concejal Torres informó que 5 mil personas se suman a las 7.000 mil que ya viven en la zona con escasos servicios de transporte y con riesgos por deslizamiento. Reciben casas con tuberías de aguas negras a la vista y rejillas de ventilación de gas en las habitaciones.

Al sur oriente de la ciudad, en la localidad de Usme (Calle 79 Sur # 7b Este – 2/32), se ubica la urbanización Rincón de Bolonia. El alcalde Enrique Peñalosa, en compañía del vicepresidente Germán Vargas Lleras y el ministro de vivienda Luis Felipe Henao, entregaron allí 520 viviendas a familias víctimas del conflicto armado, de las 988 viviendas de interés prioritario (VIP) que componen el proyecto.
La urbanización Rincón de Bolonia fue construida por el programa de vivienda gratis del gobierno nacional en concurrencia con el subsidio de vivienda en especie de la administración de Gustavo Petro. Esta urbanización no sólo se encuentra lejos del centro ampliado de la ciudad, sino lejos también de ofrecer una calidad de vida plenamente digna a sus nuevos moradores, tal y como pudimos comprobarlo en visitade campo.
Cerca de 5.000 personas que habitarán la urbanización, según las proyecciones de Codinsa y CG Constructores –firmas constructoras del proyecto-, carecen por ahora de colegios, jardines infantiles y centros de salud cercanos. Además, el servicio de buses del SITP, si bien cuenta con una ruta que llega hasta la urbanización, no envía con frecuencia este servicio, razón por la cual sus habitantes deben acudir al transporte pirata para salir y llegar:

“Hay muy poquito transporte. Sólo hay como unos del SITP, muy poquitos carros. Nos toca
pagar un carrito. Nos cobra mil diarios […] Allí a la entradita había esta mañana dos […]
pero es muy rarito […] lo que pasa es que nosotros queremos que haya diario para uno estar
saliendo […] Sólo nos entregaron el apartamento y ya […] Acá lo que nos falta es que nos
solucionen el colegio de los pelaos, el transporte […] y el tema de salud.” Uriel Ruíz
Amézquita y Cecilia Ruíz Amézquita, nuevos propietarios en Rincón de Bolonia.

Todavía más preocupante resulta el hecho de que Rincón de Bolonia es delimitado al norte por la quebrada Santa Librada y al parecer aún no se han realizado todas las obras para mitigar los riesgos existentes, como la construcción de muros de contención al borde de la ladera. Quienes recién adquirieron sus viviendas señalaron que temen un posible derrumbe en temporada de lluvias:

“Es que se ve peligroso esta parte de acá. Debería tener algún tipo de muro. Con las lluvias
eso puede derrumbarse.” Freiser Romaña, nuevo propietario en Rincón de Bolonia.

Hasta la fecha han sido terminadas 31 de las 38 torres que albergan las 988 viviendas de la urbanización. Los nuevos vecinos vivirán allí los primeros meses padeciendo la culminación de las obras. En efecto, las torres faltantes serán terminadas en mayo, y el total de los apartamentos será entregado en junio, según nos informó el arquitecto a cargo del proyecto. La urbanización no cuenta con cerramientos, parques ni amplias zonas verdes para la recreación. Las vías internas son irregulares, muy onduladas y empinadas. Los apartamentos, de 50m2, son entregados con el ladrillo la vista, la tubería de aguas negras a la vista y requerirán de futuras mejoras para hacerlos plenamente habitables:

“Empañetarlo es lo que falta. Y estucarlo, pintarlo y enchaparlo […] millón ochocientos en
mano de obra […] y en materiales cuatro y medio”. Juan Ramírez, nuevo propietario en
Rincón de Bolonia

En este punto es importante recordar que la promesa de la administración anterior – cuestionada en distintas ocasiones por su falta de realismo- consistía en entregar 70.000 VIP, de las cuales, a 31 de diciembre de 2015, sólo inició 15.267, esto es, 21,81% de las viviendas prometidas.

Además, la promesa de construir 70.000 viviendas incluía la entrega de 40.000 para víctimas del conflicto armado. Sin embargo, a final del año 2015, sólo 3.716 (9,29%) vieron esa promesa hecha realidad.

Mucho se dijo sobre la posibilidad de construir en el centro ampliado para re- densificar la ciudad, pero la realidad muestra la continuidad de la expansión urbana sobre los límites de la ciudad. Rincón de Bolonia, se suma a los dos proyectos gestionados por la administración distrital junto con constructores privados en esta zona: Colores de Bolonia y Casas de El Rincón de Bolonia. El primero incluye 1.340 viviendas (312 VIP), y el segundo incluye 115 –sobre las cuales la Personería de Bogotá emitió un pronunciamiento por
irregularidades en la construcción, incluidas la humedad y las deficiencias en las obras de mitigación1-. En conjunto, los tres proyectos suman 2.443 viviendas, y pueden albergar alrededor de 12.000 personas.
Estas viviendas de Usme se presentan como un éxito de la política de hábitat del distrito, pero presentan serias deficiencias en equipamientos sociales que no garantizan una vida digna para sus habitantes. Por supuesto, las soluciones de vivienda siempre son bienvenidas para suplir la creciente demanda de la población bogotana. Sin embargo, la carencia de equipamientos dotacionales suficientes para éstas, así como su localización en zonas de riesgo, tan sólo redundará en el mantenimiento de las condiciones de pobreza de los pobladores.

JOHN PORTELA
OFICINA DE COMUNICACIONES CONCEJAL JORGE TORRES
MAIL: comunicacionesjorgetorres@gmail.com

Texto extraído del documento oficial: